Ajuste de un casco de bicicleta
No se trata sólo de tener un buen casco de bicicleta, también hay que saber colocarlo correctamente. Descubre nuestra guía para ajustar tu casco de bicicleta
Ajustar correctamente el casco de bicicleta es tan fundamental como elegir un buen casco de bicicleta. Un casco mal colocado puede reducir su eficacia en caso de caída, poniendo en peligro la seguridad del ciclista. Ya sea para un adulto o un niño, un casco bien ajustado debe ser estable, cómodo y no impedir el movimiento. Si te tomas el tiempo para comprobar periódicamente su ajuste, garantizarás una protección óptima en todas tus salidas en bicicleta. Así que, preparados, casco ajustado, listo... ¡rueda con seguridad!
¿Cómo elegir la talla de casco correcta?
A la hora de elegir un casco de bicicleta, verás en todas partes la talla del casco expresada en centímetros. Es fácil, no necesitas una guía de tallas de cascos de bicicleta. Ya sea para un casco de bicicleta para hombre, para un casco de bicicleta para mujer o para un casco de bicicleta para niños, el tamaño adecuado es el de la circunferencia de la cabeza.
Es simple y universal, sin importar qué marca o tipo de casco de bicicleta estés buscando.
Por eso, antes de iniciar cualquier búsqueda de casco, es fundamental conocer el tamaño de tu cabeza. Expresado en centímetros, es utilizado por todos los fabricantes para indicar la talla. Aunque no existe una regla exacta en cuanto a la circunferencia de la cabeza, esta no depende de la altura, la edad o el peso.
Podemos aproximarnos a que un bebé tiene un perímetro cefálico de entre 45 y 52 cm, un niño un perímetro de entre 50 y 56 cm y un adulto entre 55 y 65 cm.
Pero como no existen reglas morfológicas, debes medir la circunferencia de tu cabeza. Lo realmente práctico de los cascos es que el tamaño de la cabeza es la única medida que necesitas para elegir el correcto.
De esta forma, es fácil comprar tu casco de bicicleta incluso en Internet.
¿Es diferente para los niños?
El uso de un casco de bicicleta es fundamental, especialmente para los niños, y es fundamental que se ajuste bien para garantizar una protección óptima en caso de caída. En España, el uso del casco es obligatorio hasta los 16 años.
Es importante elegir un casco que se ajuste a la cabeza del niño.Un casco demasiado grande, elegido para "durar más", puede comprometer la seguridad del niño en caso de accidente.
Ten cuidado también si tus hijos cogen la costumbre de ponerse el casco solos, porque las correas y el dial pueden desajustarse con el tiempo y hacer que el casco pierda su eficacia si no se reajusta. Es necesario comprobar periódicamente el ajuste correcto.
Por último, para animar a los niños a usar el casco, da ejemplo poniéndote tú mismo un casco y deja que elijan el estilo y la decoración que más les guste. Un casco elegante y que se ajuste bien hará que andar en bicicleta sea más seguro y agradable.
¿Cómo medir la circunferencia de tu cabeza?
Para ello, basta con coger un metro de costura flexible y pasarlo por un lado por el centro de la frente y por el otro por la protuberancia occipital detrás de la cabeza. Si solo tienes un metro, toma una cuerda o cinta para tomar la medida exacta de la circunferencia de tu cabeza y luego mídela con un metro.
¿Cómo colocar y ajustar correctamente el casco de bicicleta de adulto y de niño?
Después de elegir un casco que se ajuste al tamaño de tu cabeza, debes colocarte correctamente el casco de bicicleta para garantizar una seguridad óptima.
Para comprobar que el casco se ajusta correctamente, comienza aflojando el dial de ajuste tanto como sea posible.
Ponte el casco, colócalo recto sobre tu cabeza. No demasiado adelantado, pero tampoco demasiado atrás. Para orientarte, asegúrate de que esté dos dedos por encima de las cejas.
Luego ajusta el dial hasta que el casco quede bien sujeto sin molestarte. Para comprobar si todo está bien, mueve la cabeza arriba y abajo y hacia los lados. Si el casco se sujeta firmemente, no se moverá. El casco no debe hacer daño, no debe ejercer puntos de presión en las sienes y la frente y la espuma debe estar bien colocada para absorber pequeños golpes y evaporar el sudor.
Por último, deberás ajustar la correa de la barbilla y las posibles correas laterales para adaptar perfectamente el casco a la forma de tu cabeza. La correa de la barbilla debe quedar cerca de la cara sin estar demasiado apretada. Calculamos que deberías poder pasar un dedo entre la correa y la barbilla.
Las correas laterales deben, por su parte, cruzar bien debajo de las orejas formando una Y. Sus hebillas de ajuste deben colocarse debajo del lóbulo de cada oreja.
